miércoles, 13 de junio de 2012

Lo reconozco...

... en mi oficina me he convertido en una fuente de energía negativa.

O al menos esa es la sensación que tengo yo desde hace unos meses, ya que mis reacciones son siempre ver el lado malo de las cosas, cuando hace unos meses era ver siempre lo bueno.

Cierto es que las circunstancias no ayudan (toma excusa tranquilizadora), los recortes, la crisis y demás historias no permiten que trabaje en proyectos que me llenen profesionalmente todo lo que me gustaría, ojalá que las cosas fueran diferentes, pero... ahora que me he dado cuenta (ya lo sabía, pero tengo un insight) yo no puedo cambiar el entorno.

Está claro que no decido la estrategia, ni qué proyectos se hacen, ni busco clientes, ni hago cambios en la organización de la empresa. No puedo cambiar a mis jefes ni compañeros, ni tampoco tengo acceso a la dirección para convencerles de que hay otros caminos... tengo las manos atadas (desde el punto de vista tradicional, claro).

Pues ya que no puedo cambiar el entorno, ¿qué tal si cambio yo?, por que está claro que lo que hago no me lleva hacia donde quiero pero, ahora que caigo, y si actúo de manera ligeramente distinta ¿no se le pegará un poco a mis compañeros de trabajo?. ¿Y si en vez de mostrar mi lado negativo, muestro siempre el positivo?

Voy a probarlo ¿quién se apunta?

NOTA: Si no obtienes los resultados que quieres, y no sabes qué puedes cambiar para conseguirlos, ¿por qué no me llamas? www.coachingparatriunfadores.com

viernes, 8 de junio de 2012

where the streets have no name

Something I like is to use music for motivate my self, I think I already told it here, well there is a song which helps me to find inspiration and motivation when I am doing coaching because coaching is a bit like the song… go with my coachee where the streets have no name to see the dust cloud disappear and feel the sun light in my face, It is all I can do.

Volume UP, SING and ENJOY


Know when to Manage and when to Coach

I would like to share with you an interesting article publish at www.forbes.com by Holly Green.

Know when to Manage and when to Coach
Have you ever wondered why the head of a baseball team is called the manager and the head of a basketball team is called the coach? (These are the kinds of things I sometimes ponder on long airplane rides.)
The answer has to do not just with the obvious differences between the two sports, but also with how the players are coached and managed during the games. Just as baseball and basketball are two very different sports, coaching and managing are two very different activities. One has to do with directing, the other has to do with teaching.
Managing is all about telling, directing, authority, immediate needs, and a specific outcome. Coaching involves exploring, facilitating, partnership, long-term improvement, and many possible outcomes.
During a baseball game, the manager focuses primarily on strategy and managing the flow of the game. He decides who pitches and when. He positions the players in the field based on the tendencies of the batter. And he relays commands to coaches, who then tell players when to swing, when to take a pitch, and how to run the bases.
In basketball, the coach has the same authority as a baseball manager, but he gets more involved with the action on the court. He calls out plays and defensive schemes to the players, but they are then free to implement those plays (using their skills and knowledge of the game) as they see fit. During time-outs, the coach draws up plays on the clipboard. He offers encouragement, support, and suggestions. And he instructs players on how to react to many possible outcomes depending on what the other team does.
Obviously, the roles and responsibilities of a baseball manager and basketball coach overlap. But while the baseball manager focuses on authority and directing, the basketball coach works in more of a teaching/facilitating capacity.
What does all this have to do with business leadership? More than you might think.
In business, we have to be both coaches and managers. To lead effectively, we need to know when to wear which hat.
Managing involves a more directive, task-oriented style that should only be used under certain conditions. It usually produces the best results in a crisis situation, when someone has never done the task before, or when they have little or no confidence in their ability to get it done.
Coaching works best for developmental purposes, especially when you have a team of competent professionals already performing at a reasonably high level. Once you define winning for your organization, team members may need your guidance and support. But in most cases they shouldn’t need direction.
Knowing when to direct, delegate or develop is critical to managerial effectiveness. Determine which style is appropriate based on the task at hand rather than the individual. Often, people will need a combination of styles depending on the complexity of the task assigned, their experience with the task, and the competency levels required to complete it with excellence.
Direct when the employee has low to moderate competence with the skills and abilities needed to complete the task. Be sure to define excellence (what, how and when), and provide specifics (templates, examples, etc.) so the person can achieve the desired outcome. Direct when a person:
  • Is new in a role
  • Is new to the company
  • Is new to the client/customer
  • Has new job responsibilities or tasks
  • Has new ways of working
Delegate when the employee has moderate to high competence. Again, define excellence so both sides have clarity around the goal. Then let the employee determine the approach they will take and keep you informed as to their progress. Ask questions and provide direction and specific support when necessary. Delegate when a person has:
  • Some experience in the role
  • A track record or competence
  • A sensitive task or client
  • Confidence in their abilities
  • Similar ways of working
Develop when the employee has high competence and high commitment to the task. Then define excellence and get out of the way! Give plenty of recognition for successful completion of the task. Then determine the person’s next challenge. Develop when the person:
  • Has extensive experience
  • Has demonstrated evidence of competency
  • Has experienced similar clients or task sensitivities
  • Is growing new competences
  • Is trying new approaches
Sometimes we have to coach and sometimes we have to manage. But the more time we can spend delegating and developing, the more effective we’ll be.
http://www.forbes.com/sites/work-in-progress/2012/05/01/know-when-to-manage-and-when-to-coach/

miércoles, 6 de junio de 2012

Técnicas de manipulación mediática de Noam Chomsky

Considerar que somos meras marionetas en manos de grupos de poder que controlan todo es desde mi punto de vista una excusa tranquilizadora. Las técnicas de manipulación mediática que se describen en el siguiente link no hacen más que soportar esta creencia. Obviamente cada vez que comunicamos algo lo que buscamos es influir en los demás, bien para que nos responda, para que nos abracen, para que nos aplaudan, para que nos compren algo... los motivos pueden ser infinitos, pero para eso existe la comunicación, para obtener respuestas de los demás. A continuación reflexiono sobre los 10 puntos que describe Noam Chomsky.


  1. La estrategia de la distracción. Existen experiencias de noticiarios que sólo cuentan noticias buenas y felices, todas fracasaron. Consumo lo que me gusta, me da morbo, me impacta, me conmueve o simplemente me entretiene. ¿que me impide apagar el televisor, no comprar los periódicos y apuntarte a la UNED para sacarme el título de economía o derecho...? Es una elección personal.
  2.  Crear problemas y después ofrecer soluciones. Un problema es la respuesta inesperada de una solución a un problema anterior. Obviamente suele coincidir que los que toman las decisiones son lo que generan los problemas y viceversa. A mi  me pasa constantemente al programar la TV.
  3.  La estrategia de la gradualidad. Los cambios bruscos y constantes me llevan a la confusión y al bloqueo. En mi caso, cuando he querido cambiar algo en mi vida he ido poco a poco, asimilándolo, transformando mi día a DIA... lo otro no me ha funcionado. 
  4. La estrategia de diferir. Yo me quedo mejor con la Ley del Sacrificio (13ª Ley del Marketing, hay 22). Se debe renunciar necesariamente a una cosa para conseguir otra. Si voy al cine, no me puedo comprar un libro, y si salgo de copas mañana no puedo correr un maratón. A mi en mi casa me gustaría tener un fisioterapeuta todos los días, que me quitara los dolores cada vez que llego de correr o trabajar, pero tengo que decir que NO porque si no, no tendría dinero para comer o estudiar. desde mi punto de vista la crisis en España se generó por decir que Si a todo... y eso lleva a la dependencia, decir que NO lleva a la libertad. Al igual que un gobierno dice que NO a ciertas políticas, la sociedad dice NO a ciertos gobiernos.
  5. Dirigirse al público como criaturas de poca edad. Cuando he tenido que explicar una cosa complicada y lo he hecho de manera compleja y detallada... sólo unos pocos lo han entendido. Cuando lo hago con un cuento o metáfora consigo llegar a más gente. Yo no puedo elegir su respuesta, elijo como comunico lo que quiero expresar.
  6. Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión. Yo soy (era) una persona hiper-racional, eso me ha llevado muchas veces al inmovilismo, y el inmovilismo no cambia lo que soy a hora o lo que quiero ser.  Por otro lado, se ha demostrado que las que toman las decisiones son las emociones y no la lógica... al final compro el coche que le gusta a mi mujer, no el que tiene mejor calidad precio (SKODA). Por ejemplo: Un caballo se haya a exactamente la misma distancia de dos montones de paja exactamente iguales. Racionalmente el caballo irá al más grande, al mejor o al que esté más cerca, pero como son exactamente iguales racionalmente no sabría cual elegir y moriría de hambre.
  7. Mantener al público en la ignorancia y la mediocridad. Todos los días en la televisión se habla de prima de riesgo, de PIB, de deuda pública, de reforma laboral, etc... Muchas veces a niveles más avanzados que lo que se ve en un MBA. ¿No será que prefiero ver House?
  8. Estimular al público a ser complaciente con la mediocridad. Por eso es por lo que luchan algunos en fomentar el esfuerzo en las escuelas y universidades, incluso hacer institutos para los más avanzados, para que no se sientan diferentes y se queden en la mediocridad por rechazo social. Para saber donde voy primero tengo que saber donde estoy, no ser complaciente sino realista. Hace 100 años la gente luchaba por llevarse algo a la boca, hoy mis preocupaciones son: no puedo ir de vacaciones, me tengo que volver a casa de mis padres a vivir, etc.
  9. Reforzar la autoculpabilidad. Tomar conciencia de que el éxito se alcanza mediante el trabajo personal es para mi algo positivo, "a Dios rogando y con el mazo dando". Si en vez de usar esa responsabilidad para buscar nuevas posibilidades, desde el presente hacia el futuro, me quedo mirando al pasado y las oportunidades perdidas dejaré de ver las que se me presentan cada día. "Cuando pierdes, ganas el aprendizaje de la pérdida."
  10. Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen. Todo lo que saben las supuestas elites está en las bibliotecas, y al alcance de casi cualquiera que quiera aprenderlo, lo que pasa es que es más cómodo irse de cañas.